Un amigo me dijo ¿y porqué no pides en la Fundación que te contraten a tiempo completo estos meses? así te evitas broncas de andar corre y corre de un trabajo a otro? Lo pensé, lo pensé... y lo pensé tan bien que no, neta no se me antoja para nada.
Una, mi jefe no me lo propuso cuando le comenté mi situación, es más, lo que dijo fue que AHORA Sí podría ayudarles con el registro la primera semana de cursos (la vez pasada tenía una clase de noche, así que nariz boleada).
Y dos, nunca nunca tengo tanto trabajo como para que amerite estar ocho horas metida en esta hermosa pero super helada oficina (brrr, tengo frío). No señor, todo lo puedo hacer en cinco horas. Sí, ya sé que a veces me quejo de que tenía trabajo hasta la Esther, que me la pasé pegada a la compu, que la contabilidad no me salía o me pongo histérica por presentaciones hechas al vapor. Pero en general, medio tiempo es suficiente para hacer mis deberes. Neta que me daría hueva quedarme ocho horas nomás calentando la silla, todo para ahorrarme vueltas. Guácala.
Guácala también que mis últimos posts han girado acerca del tema EMPLEO. Si hubiera entrado a la escuela seguro hablaría acerca de lo ñoños que son los IQ's y los kilos y kilos de tareas que me habrían dejado YA en la primera semana. Uh, creo que mi vida es monotemática, qué mal plan...
lunes, 19 de enero de 2004
Publicadas por MiCh @ 10:10 a.m.
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