Una de dos: o ya entendí los criterios de la Academia para nombrar a los ganadores del Oscar o este año de plano no hubo sorpresas. Si hubiera entrado al sorteo de las 1500 entradas gratis al cine, hubiera ganado. Mal plan.

Whatever, quedé satisfecha. Ganó LoTR: The Return of the King, porque es la mejor de la trilogía, porque la Academia reconoció el esfuerzo de tres años y porque la industria estaba reconociendo los millones de dólares que ganaron las tres películas de la saga. LoTR era mi favorita sentimental, pero me parece que Mystic River era realmente la mejor de las cinco. De Peter Jackson ni hablar: es increíble la manera en que logró transmitir el fabuloso ambiente de la Tierra Media y sus habitantes.

Charlize Theron ganó OBVIAMENTE porque ponerse fea paga: ahí tienen a Nicole, que ganó por una nariz (aunque el premio se lo debían por Moulin Rouge!, año en que ganó Halle Berry por su pornoactuación de una desmejorada y atormentada madre). Los críticos coinciden en que su actuación es muy buena, pero si a eso añadimos algunos kilos extra y nula vanidad, seguro que ganas el Oscar.

A Sean Penn ya se la debían (¿cómo fue que no le dieron el premio por Dead Man Walking?). Penn es un actor exquisito, finísimo y frecuentemente subestimado porque en casi todas sus películas alcanza niveles de excelencia. Le tengo simpatía adicional porque tanto él como su esposa son totalmente contrarios al sistema. Antes que Nicole abriera el sobre temía que la Academia "castigara" nuevamente a un actor que tiene posturas políticas diferentes a la mayoría. Qué bueno que no fue así.

Los premios de Tim Robbins y Renee Zellwegger también ya estaban cantados. Sólo que a ella se lo debían desde hace dos años y terminaron dándole un premio de consolación.

De los otros premios... bue', me gustaba más la canción de Sting que la de LoTR y el maquillaje de Piratas del Caribe que el de LoTR. En fin, que ahora LoTR está a la "altura" de Titanic y Ben Hur, con 11 estatuillas cada una.

Para redondear... el Rey ha vuelto, viva el Rey!

ps. ¿Es mi imaginación o Sean Penn se ve más desmejoradito en sus películas que en la vida real?