- Nací un domingo a las 5.00am y estoy convencida de que ésa es la razón por la que me cuesta tanto trabajo madrugar. Un bebé debería nacer en horas más decentes.
- Tengo dos nombres pero detesto el segundo de ellos, aunque el significado sea hermoso. De niña quería llamarme Emeteria. No diré nada más al respecto.
- Adoro la cicatriz que parte mi ceja derecha y que me hice a los tres años. Realmente me encanta, aunque debido a ella jamás tendré cejas perfectamente simétricas.
- SIEMPRE llevo el cabello suelto, incluso en el trabajo y a 40°C. De ser necesario lo hago rosquita y lo escondo dentro del casco, pero no hay poder humano que me haga amarrarlo en el día. Ah! Y antes lo presumía por lacio, pero se ha vuelto rebelde el hijuesú.
- No tengo agujeros para aretes y/o pendientes, pero tuve un piercing en la ceja durante seis meses. Quiero ponérmelo de nuevo cuando me vaya a la maestría. Adoro usar un montón de pulseras y anillos, y me choca tener que quitármelos para el trabajo.
- Me como las uñas prácticamente desde que tengo uso de razón, y no creo que sea por algún problema mental o reflejo de mis inseguridades. Esas son patrañas.
- Me encantan los tenis de colores, las sandalias de pata de gallo y los lentes de sol. Hasta hace varios años me negaba a llevar bolso. Ahora se han convertido en una de mis pocas obsesiones típicamente femeninas. No me enloquece el shopping, salvo que sea para comprar música. O jerseys de futbol.. pff!
- Tengo varias manías: leer las revistas comenzando por la última página, morder las tapas de las plumas, contar los escalones de cualquier escalera que debo subir cotidianamente, guardar absolutamente TODO. De cuando en cuando emprendo campañas de limpieza en mi habitación y encuentro cosas que creía perdidas. De la oficina mejor ni hablemos. Las 5S's me van a alcanzar!
- Soy hipersensible: lloro con las noticias, las películas, al ver viejas fotos. Los perritos abandonados pueden romperme el corazón!
- Me emociona la luna llena (grande, redonda y en el cenit), el atardecer (justo cuando el cielo se ve naranja), los botones floreciendo y el rocío en las mañanas. Adoro los días lluviosos y el olor a tierra mojada. Todo eso es francamente conmovedor.
- Por supuesto que me gustan los guapos de las películas, pero suelo sentir mayor simpatía por el chico weirdo. Adoro a los hombres transgresores, inteligentes, con sentido del humor, apasionados y soñadores. Artistas -músicos- de preferencia. Los estereotipos físicos hace mucho tiempo que los superé.
- En lo primero que me fijo en las personas es en su cabello, después en sus calcetines y finalmente en su ortografía. Sí, soy una neurótica.
- Tengo miopía en el ojo derecho y astigmatismo en el izquierdo. Me hubiera gustado ser de piel negra. Al menos del color de Halle Berry.
- Mi sueño dorado es vivir en una cabaña en medio del bosque, con chimenea y una grandiosa biblioteca. Internet por supuesto -o lo que haya en aquella época-, un todoterreno en la cochera, con el amor de mi vida, muchos perros y un pingüino. OK, me conformo con el pingüino. Jxjxjx.
- Mi sitio favorito es la escalera de mi casa en Tula. Me gusta sentarme en el tercer escalón de abajo hacia arriba a ver jugar a los cachorros. Mi segundo lugar favorito es el campamento Citlali en Valle de Bravo.
- Si hay alguna cosa o animal a la que le tema profundamente, es a los cerdos. Aunque en tacos sean muy sabrosos los desgraciados.
- No me gusta que me abracen los payasos. Las botargas me dan ansiedad, sobre todo los Pooh y los Barney, y me aterran las muñecas con ojos móviles, de esos que se cierran cuando las acuestas.
- Detesto el machismo. García Márquez tiene razón cuando dice que todos los hombres son machistas y también casi todas las mujeres. Tristísimo.
- No me gusta la discriminación ni el abuso de la fuerza. Me entristece la corrupción y la desigualdad económica. Odio a las superpotencias ñoñas. Me frustra la impunidad y el tráfico de influencias.
- Me cae mal la gente soberbia, envidiosa y egoísta, los maleducados, los que no apagan el teléfono en cines/conciertos/iglesias, aquellos que no ponen límites a sus hijos berrinchudos. Pero sobre todo la gente frívola y vana.
- Me indigna la televisión local y la explosión de reality shows a lo largo del mundo. Odio a las celebutantes y su excesiva exposición ante los medios. Detesto los libros de superación personal. Me encrespa los nervios que me arremeden.
- Tengo severos problemas con el hígado encebollado, las manitas de puerco capeadas, la sopa de calabazas, las albóndigas.. y el cortadillo en T.O.D.A.S sus formas!
- Amo profundamente a Dios, a mis padres, a mis hermanos y a mis amigos. Y mis mascotas son seres importantísimos en mi vida.
- Me derrite que papá me diga "bebé" y que mamá me llame "mi niña". Los apodos que me ponen mis hermanos me alegran la existencia.
- Me mata la risa simple de mi hermano. Lo extraño bastante al Enano, y su risa es una de las cosas que más falta me hacen para ser "completamente" feliz.
- Me encanta la decoración minimalista, las salas de estar suficientemente espaciosas, con muchos cojines y almohadas. Me gusta caminar en calcetines y sentarme en el piso.
- Adoro leer. Siempre estoy leyendo, ya sea un libro, el periódico, alguna revista, blogs. En la calle siempre voy leyendo los letreros. No resisto el poder de la palabra escrita.. mucho menos si proviene del Gabo. O de JK Rowling.
- No puedo vivir sin música. La única condición que le puse a mi jefe no fue el sueldo, no fue el horario: fue que me dejara escuchar siempre música.
- El cine me apasiona y el internet me resuelve la vida. Me encantan las caricaturas tontas y los peluches pequeños. Sobre todo Bebetón, un peluche que le quité a mi hermana con engaños y al cual Lukas The Dog acaba de desnarizar. Ah, y la nueva adquisición: un primito de Hedwig que me regaló la ratilla.
- Podría sobrevivir a base de queso y lechita con choco milk. Y ensalada Santa Fé. Y molito verde del que prepara mi mami. Y helado de cookies and cream. Y..
- Cada año espero ansiosamente la Navidad, pues es la fecha en que voy a casa de mis padres y siempre parece como si jamás me hubiera ido de casa. Adoro todo el ritual que eso implica, desde escoger el menú para la cena, mi llegada a casa para envolver los regalos -una tarea que me ha sido delegada hasta el fin de los tiempos, jojojo-, la preparación de la cena -aunque sea un trabajo agobiante-, la comilona y la apertura de los regalos. Qué chido que ya pronto es Navidad..
- Me encanta hablar, y hacerlo de todas las formas: por teléfono, por chat, por mensajes de texto.. aunque no hay nada como una buena e inteligente conversación acompañada de un sabroso cafecito. Por cierto, ¡qué rico el último cafecito que me tomé un miércoles en el Starbucks!
- Me encanta mantenerme fiel a mis convicciones, aunque sean tan locas como aquella de no comer bebés.
- Me gusta mi trabajo. Nací para el cuidado ambiental y promover el desarrollo sostenible. No es sólo mi medio de subsistencia, es mi manera de trascender y cumplir mi propósito en la Tierra.
- Vivo a base de sueños, pero me encanta que se conviertan en realidades. Valoro mucho mis pequeños triunfos, pero atesoro mis grandes fracasos porque ellos me han convertido en la mujer que soy ahora.
- Amo la honestidad, la ternura, la confidencia. Me encantan las miradas profundas y la risa fácil. Me encanta besar y abrazar a la gente que amo.
- Me gusta viajar. Pero también me gusta dormir.
Pff.. por fin: versión corregida y minimizada -si, aunque no lo crean- de las listillas de hace un par de años..
1 comentario:
Simplemente me encantó. Te extraño pequeña!
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