Hoy hace dos años que adopté a mi bebé perro.
Lukas Jasper Rover es un teenager perruno feliz. Bueno, creo que ya no es propiamente un teenager sino un jovencito perruno. Whatsoever, yo lo adoro al perruncillo, aunque últimamente ha mostrado un comportamiento ligeramente gatuno: es decir, convenenciero. Ese perro del mal quiere más al ex-roomie que a mí. Pasa como con los abuelos, los hijos y los nietos: los bebetones quieren más a los abuelos porque les dan golosinas; a los padres no los quieren tanto porque los hacen comer brócoli. Jojojo.
Es que cuando el ex-roomie va a visitarnos, invariablemente le lleva pan y chocolatitos al peluche -verídico-. Y a mí que soy su madre y lo alimento diario, no me quiere el ingrato. A mí, que trabajo diez horas diarias pa'comprarle sus croquetas y sus latitas perrunas. A mí que lo saco a pasear cada tercer día. Que lo llevo a vacunar y que lo llevo a la estética.. así son los hijos -hasta los hijos perro-.. no cabe duda que ya no los hacen como antes!
Nah, la vdd es muy buen perro mi cachorro. Así que hoy, a dos años de haberlo adoptado sólo quiero decirle: te quiero Lukas Perro. Aunque no sepas leer.
2 comentarios:
Awwwwww, "aunque no sepas leer" ...casi chillo jeje...felicidades madre de Lukas Perro y a Lukas Perro propiamente :p
Awwww! eres una cuera!
Jeje, no había leído el post de Ary. Coincido con ella, se me hizo nudo en la garganta.
Un abrazote Mich, Lukas no pudo estar en mejores cuidados.
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