martes, 21 de octubre de 2003

Amo a los perros. Pero hay una pinkie perra maldita, pelona y del desierto a la cual odiooo!
(Nota de la Redacción: los adjetivos "maldito pelón del desierto" se aplican solo, en ese estricto orden, a todo ser por demás indeseable)
La perra maldita pelona del desierto vive en una casa muy cerca de la mia. Es una perra consentida, lo que la hace más indeseable. Mis perros son chiflados pero buena onda. Esta perra está chiflada mala onda. La ñoña me ladra siempre que paso cerca de su casa. Pero no sólo me ladra, se pone histérica y me persigue y arma pancho. Tanto que un día se asomó su dueña por la terraza, me buscó con la mirada y me siguió tooodo el camino hasta que di vuelta. Total que hace unos días pasé por la casa de la maldita perra pelona del desierto y estaba su dueña con ella. La ñoña comenzó a ladrar (noo, la dueña no, la perra) y la tipa dijo para sí misma, pero con toda intención de que la escuchara: cuando los perros le ladran mucho a una persona es porque tira mala vibra... o porque algo les hizo.
¿O seaaa qué quiso decir? Yo no soy mala onda, a mí los perros me adoran. El que esta perra en cuestión sea una chiflada no es mi culpa, pero de ahí a que insinúen que le hice algo, nooo, eso no lo puedo soportar!

Ahora que... si ya me dieron la idea... mmm... ningún perro se resiste a un buen pedazo de carne... envenenadooo! Jajaja, que mala soy! N'ombre, yo no mato ni a las moscas. Ni siquiera a las hormigas. Pero a esta perra sí la odiooo!

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