Este post estuvo guardado por 30 días. Los mismos 30 días que han pasado desde que supimos del "retiro forzoso" de mi jefe.
Cuando platicaba con amigos o familires me daba cuenta de la suerte que tenía al contar con un empleo agradable, con los suficientes retos como para aprender en dos años lo que me llevaría al menos cinco en cualquier otro lado; rodeada de un equipo de profesionales expertos en su campo pero aún más, verdaderos amigos; dirigidos por un hombre con la suficiente visión como para dejarnos trabajar sin supervisión pero también con el suficiente cuidado como para no permitirnos tropezar. El eslabón débil de la cadena siempre fue la paga, pero hay cosas que el dinero no puedo comprar, lo dice muy sabiamente el comercial, jajaja! Neta, no puede ser más cierto en este caso.
Claro que la buena suerte no puede durar mucho, así que hace un par de meses la paga se hizo menor, a los retos los volvieron inalcanzables y el equipo de trabajo fue disuelto por los "expertos rescatadores de empresas", lean manufactory de por medio -bullshit!-
¿Cuál de todas las pérdidas me ha resultado más difícil de llevar? La gente, por supuesto, porque como ya bien dijimos, hay cosas que el dinero no puede comprar. A los demás "muchochos" los seguiré saludando por la planta, pero a partir de mañana ya no veré al iniciar la jornada la luz encendida de la oficina de mi jefe (quien siempre llegaba una o dos horas antes, such a workaholic), ya no tomaremos el café sin azúcar y dos cucharadas de crema mientras priorizamos juntos los pendientes del día, ya no me divertiré con las expresiones pintorescas que nunca supe interpretar adecuadamente y ya no habrá quien me llame "princesa" ni quién se preocupe por dejar sola a "la niña". Sé que esto no es para nada una despedida, he's still alive, pero realmente lo voy a extrañar. No sólo porque al parecer el Cielo quiere que aprenda paciencia a fuerza de golpes y me ha enviado con el peor de los jefes (el gordito del mal) sino porque, tristemente, cada vez es más difícil compartir la vida con personas íntegras y mi anterior jefe es una de esas pocas personas. Afortunadamente sólo deja de ser mi jefe, pero no una de las personas que más cree en mí, una suerte de padre postizo, mi consejero particular. Nos seguiremos viendo.
Y ahora un pequeño mensaje para los expertos rescatadores: la verdadera fortaleza de una organización está en su gente. En caso de que no lo sepan.
martes, 30 de septiembre de 2008
Cambios
Publicadas por MiCh @ 10:45 a.m. 3 comentarios
jueves, 11 de septiembre de 2008
I'm with the vampires, of course..
Hoy en la tarde/noche, a eso de las 19.00hrs, terminé de leer la saga de Crepúsculo: Twilight, New Moon, Eclipse, Breaking Down y el borrador de Midnight Sun que está disponible en el website de Stephenie Meyer (please Stephenie, finish the book!) Fueron nueve días de lectura frenética -un nuevo récord personal-, sólo interrumpidos por "necesidades humanas" y el muy necesario tiempo de trabajo.. en realidad, sólo el suficiente como para guardar las apariencias, jojojo!
Francamente no sé qué hacer ahora que terminé los cuatro libros y medio de la saga. Sólo fueron nueve días de abstracción de la sociedad -y creo que Lukas Perro no sufrió demasiado como hace un año con Potter-, pero una vez más debo hacer el esfuerzo de reintegrarme a la vida normal, una vida donde desafortunadamente no existen los hermosos vampiros "vegetarianos" de ojos dorados.. Edward Cullen, ¿por qué diablos no eres real? No me importan tus carros -bueno, el Vanquish es lindo- o tus inmensas cuentas bancarias, ni siquiera tu sobrehumana belleza. Sólo quisiera que soñaras conmigo.. si acaso pudieras soñar. O ya de perdido una noche con plumas, you know what I mean, jajaja!
Mi primer contacto con Crepúsculo fue en Pieces of Flair del Facebook, donde abundan los botoncitos con referencias a la saga. ¿Quién es Edward Cullen?, me pregunté. Como siempre el buen Google salió al rescate y me mordió la curiosidad. Unos días después vino la desafortunada decisión de Warner de mover ocho meses el estreno de la sexta película Potter, cuyo lanzamiento dos días antes de mi cumpleaños me parecía el mejor de los regalos que podría recibir. Poco tiempo después Summit Films, ni tardo ni perezoso, adelantó un mes el estreno de Twilight justo a la fecha que dejaba vacante Potter. Fue entonces que le pregunté a la Ratuna si quería acompañarme en la aventura vampírica, hicimos todos los arreglos y.. por supuesto que le gané, ella apenas lleva el primer libro y yo ya he terminado los cuatro y medio, como dije al principio del post. En el camino mordí a algunos cuantos: una amiga del trabajo, Jekyll, mi roomie, la morrita.. y los que se dejen los próximos días. Y bueh, nada puede ser un sucedáneo de Potter, pero me alegra que la movie que ocupe su lugar sea Twilight. I'm with the vampires, of course..
Contrario a Potter, en Twilight no encontré valores universales que quisiera transmitir Stephenie, pero sí algunos guiños a sus mormon beliefs. Dejando eso de lado, la saga es una historia de amor apasionado y tormentoso.. justo como las que me gustan. Aún no distingo si mi enferma afición a la lectura se deba a que en los libros encuentro sentimientos tan exultantes como los míos, o si de tanto leer he comenzado a sentir como un personaje de literatura. Una Alonso Quijano cualquiera. Sólo sé que necesito desesperadamente encontrar otra saga que capture mi atención, y no hay mucho de donde escoger porque Narnia, LoTR y Potter ya pasaron por mis manos. Así que se aceptan sugerencias..
PD. Los gustos musicales de Stephenie son la onda también: por supuesto que Muse es una de las mejores bandas del mundo!
Publicadas por MiCh @ 10:45 p.m. 3 comentarios