Sí, me desaparecí una semana...

Veinte amigos de todo el país vinieron a Mty a una capacitación de Compa. El evento fue en la Fundación donde trabajo y pues, en las mañanas yo cumplía con mis actividades laborales y apagaba fuegos, y por las tardes estaba con ellos o seguía resolviendo pendientes. Fue un tiempo rico, salvo que, como en los últimos tres campamentos, di más de lo que recibí. Es super chido ver que muchas amistades siguen intactas, como si nos viéramos a diario. Pero también es triste ver que otros consiguen nuevos amigos y uno se queda con los mismos, firmes y al pie del cañón, pero siempre los mismos.

Para el viernes ya estaba super cansada y el nacimiento de los cachorros de Laishita Bebé me alivianó el weekend.
Vino la Ary, yo andaba con la organización de un desayuno y no pude irme de farra con toda la raza. Claro que el sábado, en una de esas diosidencias, me la topé en el museo acompañadita de su novio (ehhh, esa no me la sabíaaa!). La Ing Ruiz :) se ve guapísima, feliz y contenta... iba a decir que con menos traumas, pero no, parece que eso lo traemos en la sangre los IQ's con centro líquido y azul, jajaja.

Resumiendo la semana, fueron días de muuucho trabajo y muuuchas lágrimas. Retos, confrontaciones, conversaciones truncas, tropiezos... y una vez más, la conciencia de que tengo un corazón de esponja.
Debería hacerle caso a Benny: "tonto corazón, no te dejes destruir, el acuerdo fue guardar la razón, tienes que entenderlo, es mejor dejarlo así..."